ALAYANS STUDIO PARA ENDESA
El consagrado Festival Jardín de las Delicias, ubicado en la Ciudad Universitaria de Madrid, acogió a aproximadamente 50.000 asistentes en su quinta edición. Una vez más, este evento que homenajea al cuadro homónimo de El Bosco desplegó todos sus encantos a través de un cartel diseñado para amantes de la música de todas las edades, decorados fantásticos, performances mágicas y muchas más actividades como las ofrecidas en el Espacio Endesa.
Este paso más allá llevado a cabo en esta edición se refrenda en las grandes sorpresas que los fans pudieron disfrutar. El talentoso y experimentado compositor argentino, Coti, presentó por primera vez en directo Canción de luto, una radiografía del desamor que tuvo a la cantante Ana Guerra como la invitada más especial: “Queríamos presentar esta canción que acaba de salir, cantarla y tocarla en directo. Muy feliz de que Ana haya podido entrar, un acto de generosidad hermoso para el público y para mí”, explica el cabeza de cartel.
La espectacular puesta en escena de Coti y de su banda, tocando auténticos hits en la memoria colectiva de todos los amantes de la música en español, removió a un público de todas las generaciones y generó una comunión anhelada por la propia Ana Guerra minutos antes del directo: “Es la primera vez que vamos a hacer directo de esta canción y me parece un marco impresionante que sea aquí”, detalla la artista.
Un derroche de energía
El Recinto de Cantarranas brilló más que nunca. Tanto en el Escenario Endesa como en el Escenario Bosque como en las zonas de descanso y actividades, la minuciosa conservación del entorno y las comodidades para los asistentes redondearon la velada. Los shows de 41 artistas de primera fila del panorama musical nacional se complementaron con la sensación de estar viviendo una experiencia onírica en el resto de zonas del festival.
Las performances que se desarrollaban a lo largo y ancho del recinto universitario embelesaron a los espectadores de este festival. Unas criaturas mágicas coloridas, diseñadas por el artista Pablo Méndez, pusieron una nota divertida e imaginativa al evento. Asimismo, la cuidada identidad visual y decoración festivalera, ideada enteramente por la diseñadora Aída Cortés, crean una personalidad propia basada en la idea de que la belleza es un camino para crear felicidad. Un amplio abanico de colores adornó todas las zonas del festival, destacando sobremanera el diseño del Escenario Bosque.
Este detallismo exacerbado en el entorno tuvo uno de sus claros pilares en la sostenibilidad. De la mano de Endesa como patrocinador sostenible, el recinto escogido por el Festival Jardín de las Delicias tomó medidas en pro del medio ambiente y dio un paso más en esta materia respecto a anteriores ediciones.
Más novedades
Si bien el certificado Greener Future cosechado en las dos ediciones predecesoras ya muestra la clara vocación sostenible de este festival, la dedicación en este ámbito ha ido aún más lejos en este 2024. Para todos los asistentes al evento, Endesa y la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) dispusieron de autobuses eléctricos lanzadera gratuitos, tanto para llegar como para volver del Recinto Catarranas. Al hilo de propiciar una movilidad sostenible, también se ofreció aparcamiento gratuito para los 50 primeros coches eléctricos que dejaran estacionado su coche en el parking de Ciudad Universitaria.
La economía circular es otro de los bastiones de la estrategia de la compañía y del festival y, además, se hizo notar por parte del público. El modelo de producción sostenible se refrendó en la reutilización en un 90% de los elementos decorativos del año pasado para minimizar residuos. Igualmente, se impulsó el uso de botellas reutilizables o cantimploras en los involucrados en la producción del festival y se gestionaron de manera eficiente los residuos a través de un sistema de recogida selectivo.
“Empezamos a patrocinar música en 2022. Entendimos que la música era un territorio que ofrece experiencias donde la gente va en familia, con los seres queridos y con amigos a pasárselo bien. Queríamos estar en un territorio donde podíamos aportar”, señala el Responsable de Patrocinios de Endesa, Ignacio Asensi.
Otro de los ejemplos de esta filosofía se refrenda en la renovación de las lonas que recubrían las torres de sonido. Su vida útil se acabó y se reutilizaron en forma de tote bags. Los equipos eléctricos utilizados en los escenarios y en otras instancias del festival también eficientes y se recurrió a tecnología LED en la iluminación. Y, además, todas las emisiones de 2023 se han compensado al completo a través de una plantación de 411 árboles en Navalacruz (Ávila), que permitirán la absorción de 85 toneladas de CO₂ durante los próximos 50 años.
Tras una vinculación exitosa que se ha confirmado con el paso del tiempo, Endesa y el Festival Jardín de las Delicias han sellado la renovación de su colaboración hasta 2026: “No hemos hecho todavía todo lo que queremos hacer de suministro, de movilidad y de reciclaje, por lo que este periodo de renovación nos da tranquilidad y el tiempo para poder hacer todavía más medidas y ejecutarlas más fuertes y claras”, finaliza Asensi, deseoso de descubrir qué nos depararán las siguientes ediciones de este evento.