Una mujer, de 28 años y de nacionalidad filipina, que formaba parte de la tripulación de un crucero, fue detenida por los Carabineros italianos tras haberse descubierto un recién nacido muerto en su camarote. Así lo han informado este lunes varios medios.
Según las primeras investigaciones, la mujer mantuvo oculto su embarazo para poder seguir trabajando en el crucero Silver Whisper y el bebé habría quedado solo en la camarote sin atención médica. La madre se encuentra en estado de confusión y parece que por ahora no ha dado ninguna explicación sobre lo sucedido. Por el momento, las investigaciones realizadas por los carabineros aún se encuentran en su fase inicial.
Según acaecieron los hechos, fueron los propios compañeros de la mujer los que dieron la alarma el domingo alrededor de las 19.00 horas tras escuchar gritos provenientes del camarote y encontrar al bebé muerto. Tras ello, llamaron a la policía italiana, que acudió al barco en mar abierto con una patrullera y registró el camarote y otras habitaciones del barco.
El cuerpo del niño, encontrado por los Carabineros fue trasladado al hospital para ser sometido a una autopsia, mientras que la mujer fue llevada a la provincia de Grosseto, en el centro de Italia, para un chequeo médico y su posterior detención, según los medios locales. Al parecer, el bebé nació a bordo del barco el viernes mientras navegaba frente a Porto Santo Stefano, en la provincia de Grosseto.
La mujer compartía el camarote con otros dos miembros de la tripulación, aunque según los medios ninguno de sus compañeros había notado el embarazo. Un primer examen externo realizado ha indicado que la muerte no se produjo por asfixia, por lo que la primera hipótesis es que el bebé habría sido dejado solo dentro del camarote por su madre durante horas sin ningún tipo de atención médica adecuada y sin alimentación.
