España perdió en los tres primeros meses del año 139.700 trabajadores con respecto al nivel de ocupación en el que cerró 2023. A la vez, el paro aumentó en 117.100 personas, según refleja la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con estas variaciones registradas en el inicio del año, en el primer trimestre de 2024, España acumuló un total de 21,25 millones de ocupados y 2,98 millones de desempleados.
En el primer trimestre se destruyó empleo, como ya ocurría hace un año. En el arranque de 2023, el volumen de trabajadores se redujo en 11.100 personas -la menor caída para un primer trimestre desde el estallido de la crisis financiera- y el paro creció en 103.800 personas. El comportamiento del empleo en los primeros tres meses del año suele ser negativo por el fin de las rebajas y la campaña de Navidad. En los últimos diez años, el desempleo ha crecido en el primer trimestre en siete ocasiones y en diez se ha destruido empleo.
No obstante, el mercado laboral ha mostrado un gran dinamismo en el inicio de 2024, tal y como ya apuntaban las cifras de afiliación difundidas mensualmente por el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social. Solo en el mes de marzo, España sumó 193.000 ocupados con respecto a febrero, la segunda cifra más alta para este mes desde que hay registros. La campaña de Semana Santa aupó esta creación de empleo: solo la hostelería aportó 83.946 puestos de trabajo, una cifra nunca vista en un mes de marzo.
Con ese broche como cierre del primer trimestre, España ha empeorado en el comienzo de 2024 los datos de ocupación con los que despidió 2023; empeora también la cifra de paro. Según la EPA, el año pasado terminó con 21,25 millones de trabajadores, 783.000 más que en el cuarto trimestre de 2022, y con 2,86 millones de desempleados, situándose la tasa de paro en el 11,76%.
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