El Gobierno se ha marcado entre sus propósitos eliminar la 'golden visa' para extranjeros que inviertan en vivienda. La primera maniobra para avanzar hacia ese objetivo fue el análisis este martes en la reunión del Consejo de Ministros de un informe elaborado al respecto para desgranar la aplicación de este tipo de permisos de residencia en España desde su creación en 2013. El documento apunta a la "necesidad" de suprimir esta figura por la "presión" que ejerce sobre el mercado de la vivienda en puntos concretos como Barcelona, Madrid y Málaga, que concentran el 70% de las concesiones, aunque reconoce el "bajo" impacto de la medida sobre los precios a nivel nacional.
En los diez años que lleva en funcionamiento la 'golden visa', 14.576 inversores de fuera de la UE -la mayoría ciudadanos chinos y rusos- han obtenido un permiso de residencia en España por la compra de viviendas de un valor igual o superior a 500.000 euros, según los datos recogidos en el informe y difundidos este martes por la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez. "Este tipo de inversiones tensionan el mercado e incrementan el precio de la vivienda", aseguró la socialista en rueda de prensa, recalcando la necesidad de modificar la ley aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2013 para eliminar esta medida, que fue puesta en marcha en un contexto de crisis para atraer y retener la inversión.
El apetito inversor despertado por la vivienda al amparo de esta figura no ha sido homogéneo en todo el país. La mayoría de las inversiones se han concentrado en la provincia de Barcelona, que ha concentrado el 33% de los permisos de residencia concedidos por la compra de bienes inmuebles desde 2013. Le siguen Madrid y Málaga, donde se han aglutinado respectivamente el 19% y 18% de las concesiones. Estas tres provincias junto a Alicante (10%), Baleares (5%) y Valencia (4%) han concentrado el 90% de este tipo de autorizaciones de residencia, que no exigen permanencia en el país para ser renovadas.
Teniendo en cuenta esta distribución desigual de las 'golden visas', el informe elaborado por los ministerios de Vivienda, Economía e Inclusión admite que retirar esta figura tendrá un impacto "bajo" sobre el precio de la vivienda a nivel nacional. Y es que, aunque los datos disponibles no permiten saber a cuántos inmuebles han alcanzado las inversiones asociadas a estos permisos de residencia, todo apunta a que se trata de una proporción muy minoritaria respecto los más de 26,8 millones de viviendas que conforman el parque español.
No obstante, la ministra de Vivienda se ha mostrado convencida de que la eliminación de las 'golden visas' sí permitirá aumentar la oferta de vivienda y, en consecuencia, aliviar los precios en aquellas zonas donde las inversiones han tenido mayor incidencia. "Si bien no puede deducirse un impacto global significativo de esta figura sobre los precios de la vivienda, sí se observa una importante concentración geográfica que, cuando se analiza a nivel de municipio o incluso de distrito, podría estar ejerciendo una presión anormal sobre la demanda de vivienda en esos ámbitos y, por tanto, sobre el precio", señala en esa línea el informe, que apunta también a la gentrificación de estas zonas.
En ese sentido, el análisis recoge como ejemplo los casos de Marbella y Barcelona. En estas ciudades las adquisiciones de viviendas ligadas a la obtención de 'golden visas' llegaron a representar respectivamente el 7,1% y el 5,3% del total de compraventas registradas en 2023. A la luz de estos datos, Rodríguez subrayó este martes la "necesidad" de eliminar este tipo de permisos para dar una respuesta "excepcional" al problema de la vivienda en lugares "concretos" de la geografía nacional.
La ministra de Vivienda también justificó la pertinencia de la medida por el rápido crecimiento que han sufrido las autorizaciones de residencia bajo esta figura en los dos últimos años. Según los datos difundidos por su departamento, en 2021 se otorgaron 997 visados por la inversión en bienes inmuebles, en coherencia con las cifras anotadas en los años inmediatamente anteriores a la pandemia (947 en 2017, 998 en 2018 y 861 en 2019). Sin embargo, el dato se duplicó en 2022 hasta los 2.017 permisos y siguió disparándose en 2023 hasta alcanzar los 3.273, con un importe medio de la inversión de 857.105 y 769.332 euros respectivamente.
"Nos dirigimos a dar una respuesta para acabar con la especulación que se ha incrementando de manera muy notable a raíz del año 2022", expresó ante este auge de la 'golden visa' Rodríguez, que recordó que España no es el único país europeo que avanza hacia su restricción. "Esto no es solo iniciativa del Gobierno de España. La Comisión Europea instó en 2022 a los Estados miembros a derogar inmediatamente cualquier sistema de ciudadanía para inversores existente y a garantizar que se establezcan controles estrictos para abordar los riesgos que plantean los sistemas de residencias para inversores. Países como Irlanda o Portugal ya han eliminado dichos visados y otros están endureciendo los requisitos para obtenerlos", señaló.
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