Hace no tantos años, en los cuartos de baño era habitual encontrar revistas, crucigramas o libros para matar el tiempo mientras el organismo hace sus funciones más básicas.
Pero desde la llegada de la telefonía móvil inteligente, nuestros dispositivos se han convertido en un elemento casi imprescindible para entrar en el aseo a cumplir con la llamada de la naturaleza.